La Feria del Libro de Zaragoza ha llegado a su fin con un resultado positivo, según la asociación de libreros, que estima que las ventas han aumentado un 10% respecto al año anterior, a pesar de que el segundo fin de semana ha coincidido con el mercadillo medieval. Los libreros han comenzado a vaciar las más de 67 casetas, ubicadas en el paseo Independencia de la capital aragonesa, y a trasladar los cientos de ejemplares a las librerías, después de nueve días de feria. Alrededor de 300 autores se han acercado a la Feria del libro para firmar ejemplares y entablar coloquios con los lectores, según ha indicado a Efe el presidente de la Asociación de libreros, César Muñío. Alberto Vázquez Figueroa, con su obra "Saud el leopardo", ha sido uno de los autores que más interés ha despertado y en torno al que se han creado grandes filas de lectores dispuestos a conseguir su firma. Entre los libros más vendidos, Muñío ha destacado "El viajero del siglo" de Andre Neuman, premio Alfaguara 2009; "La Conspiración Piscis" de Magdalena Lasala; el "Círculo Hermético" de Fernando Lalana o el "Aragón a la brasa" de Joaquín Carbonell. La mayoría de los libros vendidos pertenecen al género narrativo. Durante nueve días de Feria, se han llevado a cabo presentaciones, certámenes, y recitales de poesía que han atraído a un gran público, según ha explicado Muñío. Este año, el premio al libro mejor editado, otorgado por el Gobierno de Aragón, ha recaído en "Los años convulsos", escrito por Juan José Oña y elaborado por Pirineum. Sin embargo, las actividades dirigidas al público infantil han sido el "punto flojo" debido al presupuesto de la feria, ha explicado el presidente de la asociación de libreros, quien ha añadido que el objetivo del año que viene es realizar cuenta cuentos para los más pequeños.
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